Estamos al tanto del reciente comunicado de prensa que indica que la administración de Trump planea exigir que los inmigrantes de 14 años o más en los Estados Unidos se registren y proporcionen sus huellas dactilares al gobierno estadounidense. El incumplimiento de esta norma podría resultar en enjuiciamiento penal o sanciones civiles. Esta propuesta busca revivir una disposición inactiva desde hace mucho tiempo de una ley de la década de 1940 que una vez requirió que los inmigrantes se registraran en su oficina de correos local, supuestamente como una medida de seguridad nacional.
Por el momento, los detalles específicos sobre cómo se implementará esta política siguen sin estar claros. Es posible que enfrentamientos legales retrasen o bloqueen su aplicación, como ha ocurrido con muchas políticas migratorias de esta administración. Sin embargo, la intención detrás de esta propuesta es evidente: es otro paso en el esfuerzo continuo de la administración por aumentar las restricciones a los inmigrantes, especialmente a aquellos sin estatus legal.
Entendemos que el constante flujo de nuevas políticas y regulaciones de inmigración puede ser abrumador y angustiante. La incertidumbre en torno a este requisito de registro puede generar más ansiedad en las comunidades inmigrantes. Queremos asegurarles que estamos monitoreando de cerca los acontecimientos y mantendremos informados a nuestros clientes sobre cualquier cambio concreto en la ley. Si este requisito entra en vigor, proporcionaremos orientación sobre cómo afrontar la situación.
Mientras tanto, animamos a las personas a mantenerse informadas, consultar con profesionales legales antes de tomar cualquier acción y evitar tomar decisiones basadas en el miedo o la desinformación. Nuestra firma sigue comprometida a defender los derechos de los inmigrantes y a garantizar que nuestros clientes reciban la información más precisa y actualizada disponible.